30 de marzo de 2012

Potaje de Rellenos

       Este potaje, tradicionalmente, de Semana Santa, me lo enseñó mi suegra. En casa lo hacemos durante todo el año, puesto que nos gustan mucho las legumbres. Es un plato completo, sano y, para nosotros, delicioso. Por eso, llega a ser un peligro, porque el plato siempre tiene de más.


    Plato tradicional, lleno de vitaminas y energía, sano, de cuchara... teníais que ver cómo se comen este potaje mis hijos. 

Ingredientes:

  • Habichuelas blancas
  • Garbanzos
  • Espinacas
  • Pan (del día anterior), pan rallado también nos vale
  • Ajo y Perejil (para las albóndigas o rellenos)
  • Ajos con piel
  • Zanahorias
  • Huevo batido
  • Aceite de Oliva Virgen Extra
  • Sal
  • Un par de patatas medianas, cascadas
  • Un par de cucharadas soperas de salsa de tomate casero
  • Podemos poner bacalao salado (previamente desalado)*, o dejarlo viudo (las legumbres, verduras y patatas a solas)


   Ponemos un buen chorro de aceite de oliva en una sartén y doramos los ajos con piel; los reservamos. Hacemos un sofrito con media cebolla, añadimos tomate frito y, después, pimentón picante. Apartamos del fuego.
     Lo primero será poner a cocer las habichuelas y los garbanzos.
   Mientras, prepararemos los rellenos: ponemos el pan troceado con huevo batido y lo dejamos que se reblandezca, añadimos ajo y perejil troceado. Les daremos forma con dos cucharas o con las manos. Freímos en abundante aceite de oliva muy caliente. Los vamos dejando sobre papel absorbente y los apartamos, para más adelante.
   Cuando las legumbres llevan hirviendo unos 20 minutos, añadimos las espinacas y las zanahorias a rodajas.
     Agregamos el sofrito, los ajos y las patatas. Si vamos a poner bacalao, lo añadiremos ahora. Dejamos hervir otros 10-15 minutos.
    Incorporamos las albóndigas/rellenos. Si comprobamos que las legumbres están tiernas, tapamos y apagamos seguidamente. Si no, dejamos otros 5 minutos o lo necesario hasta que estén hechas las legumbres.
*Para desalar el bacalao, si el trozo es grande lo pongo a remojo de un día para otro. En un recipiente con agua, en la nevera y cambiando 3 veces el agua de desalar por agua limpia.

    ¡Espero que lo disfrutéis tanto como nosotros!

29 de marzo de 2012

Entrada Especial

   No soy muy de premios, de hecho, no soy nada de premios. Pero, para mí, esto no es un premio, sino un empujoncito de gente que te aprecia, que le gusta lo que haces... Además, la idea es dar a conocer blogs que, aunque son muy interesantes y tienen cosas muy buenas (además de grandes personas detrás), no son demasiado conocidos y pensamos que vale la pena visitarlos y participar de la ilusión que les ponen sus autores.
   A mí me lo ha dado un cocinillas la mar de alegre, con ese toque de humor socarrón que tanto me gusta, porque te da mucho juego, y su blog Pasar del Aire es fiel reflejo de ello: Gracias
Y, como tenía que elegir 5 compañeros con menos de 200 seguidores en su blog, ahí van:

 Belén de Bolón Bombón que empezó hace poquito y se merece un empujón. Vale la pena conocerla.
 Sílvia de Cuinar és senzill que, teniendo platos salados, nos trae desde Menorca unos dulces ricos, ricos.
 Teresa desde la Cocina de Tesa, con su cocina variada, desde Canarias, adornadas con unas fotos muy, muy chulas.
 Noelia de Sweet Noelia, sobre todo con sus dulces: como no podía ser de otra forma.
 Raquel de Soul Kitchen, por ser diferente, divertida, bilingüe (si quieres practicar tu inglés te irá bien visitarla) y, además de deliciosas, sus recetas vienen aderezadas musicalmente.

   Os animo a visitar estos blogs y veréis cómo cada uno tiene su toque especial.
 

28 de marzo de 2012

Torrijas de Naranja (Sin Lactosa)

   La torrija es un dulce típico de las celebraciones de Semana Santa en España , así como en algunas regiones de distintos países sudamericanos. Es un alimento de origen humilde que satura pronto al comensal. 

   Whole Kitchen en su Propuesta Dulce para el mes de Marzo, nos invita a preparar un clásico de la gastronomía española, Torrijas.


   Yo las he preparado sustituyendo la leche por zumo de naranja, recién exprimido, sin nada más. Si lo queréis más dulce, podéis añadirle azúcar, miel, mistela u otro vino dulce... pero, a mí, me gusta ese toque ácido del zumo.


Preparación:
   - Cogemos las rodajas de pan de uno o varios días atrás, las ponemos a remojo en el zumo de naranja. 
   - Batimos el huevo y rebozamos en él las rodajas de pan.
   - En aceite bien caliente, freímos las torrijas hasta dorarlas.
   - Las ponemos sobre un papel absorbente para quitar el exceso de aceite.
   - Espolvoreamos de azúcar y canela, o miel.


Ideales, acompañadas de un delicioso moscatel (valenciano, por supuesto)
¡ Espero que os gusten!

25 de marzo de 2012

Crema de Calabaza, Coliflor y Zanahoria

   Me encanta el color naranja, os lo había dicho? Mi cocina la tengo pintada de naranja,  me transmite energía por las mañanas. Me anima ese color y, creo, que es una de las razones por las que no faltan nunca zanahorias en mi nevera. 
   Esta crema que os traigo es naranja, ligera, sabrosa, y el roquefort le da un toque especial.

Ingredientes:

  • 250 g de calabaza
  • 250 g de coliflor
  • 2 zanahorias pequeñas
  • 25 g de queso roquefort
  • Un poco de comino molido (esto es opcional, hay mucha gente a la que no le gusta su sabor)      
     Pelamos la calabaza, le quitamos pipas y hebras y la troceamos. Pelamos las zanahorias.
   Ponemos a hervir la calabaza, con la coliflor y las zanahorias y un vasito de agua. Ponemos sal al gusto y dejamos cocer hasta que, pinchando la calabaza, comprobamos que está cocida.
   Añadimos un buen chorro de aceite de oliva y una cucharada de mantequilla, así como el roquefort. 
   Trituramos bien. Si vemos que queremos la textura de la crema más ligera, podemos añadir un poco más de agua o, si tenemos, de caldo de verduras. Rectificamos de sal, si es necesario.

   Podemos decorar y darle un toque crujiente con unas pipas de girasol.

¡Que aproveche!

20 de marzo de 2012

Pastel de Alcachofas

   En casa sólo a mí me gustan las alcachofas. Y me gustan mucho pero, sin darme cuenta, hay veces que tengo docenas en la nevera.
   Por comodidad, casi siempre las hago a la plancha. Aunque, alguna vez, me las hago fritas (pocas, por lo de las calorías). El caso es que siempre a la plancha, pues cansan. Así que, un día, se me ocurrió hacerlas de esta forma y salió un rico, rico pastel.

 Utilizaremos:

  • 3 cs de leche
  • 1 cp maizena
  • 2 huevos batidos
  • Sal
  • Pimienta molida
  • Una pizca de jengibre molido (del seco)
  • 100-110 ml de "nata" vegetal
  • 150 g de alcachofas limpias y troceadas
  • Unos trocitos de queso roquefort (si es de oveja, lo tolero bien)
  • Mantequilla o margarina para el molde

(cs: cucharada sopera; cp: cucharada de postre)


   Primero, precalentamos el horno a 180º.
   Batimos los dos huevos y vamos añadiendo: la maizena, la sal, la pimienta y el jengibre, la leche y la nata vegetal.
   A esta mezcla, le unimos las alcachofas y vertemos en el molde, previamente engrasado con la mantequilla.
   Horneamos (calor arriba y abajo) durante15 minutos y añadimos los trozos de roquefort por encima. Volvemos a poner en el horno unos 20 minutos más, dependiendo de nuestro horno.

   Rico, fácil, sano... ¡que aproveche!
   

   

18 de marzo de 2012

Lasaña Mar y Huerto

    Aunque no suelo preparar mucho Lasaña o Canelones (no sé por qué), sí que he hecho las más clásicas: de carne, de pollo, de espinacas y atún... Así que, en esta ocasión, quería hacer algo un poco diferente.
   Y, puesto que Whole Kitchen en su propuesta salada para el mes de marzo, nos invita a preparar un plato clásico de la cocina italiana: lasaña, decidí probar una combinación que (aunque no lo esperaba) ha tenido gran acogida entre mis comensales habituales.

   Cada uno de mis niños se comió una generosa ración de Lasaña Mar y Huerto. Así que, además, es una forma bastante disimulada para que los niños coman pescado. El pescado que he utilizado es trucha, asequible y rica.
Utilizamos:
   Para el relleno:

  • 15-16 placas de lasaña, de la que no se necesita hervir 
  • Una trucha mediana (140 g de filete limpio y desespinado)
  • 125 g de gamba pelada y troceada
  • 1 puerro pequeño
  • 200 g de espinacas cocidas y troceadas
  • sal
  • aceite de oliva
   Para la bechamel:
  • Media cebolla pequeña, troceada muy finamente
  • 300-350 ml de leche (la mía, sin lactosa) o, si tenéis, de caldo de verduras
  • 3 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra (o de mantequilla)
  • 3 cucharadas soperas de harina de todo uso
  • sal
  • nuez moscada
   Para el relleno:
  • Abundante queso rallado, en mi caso, de cabra tipo manchego
   Cortamos el puerro en trocitos muy pequeños, salamos un poco y lo pochamos en una sartén con un buen chorro de aceite de oliva. 
   Cuando empieza a estar transparente, ponemos los trozos de gamba y de trucha. Salamos y rehogamos un poco todo junto. Agregamos las espinacas troceadas. Rectificamos de sal y reservamos.
   En una sartén honda o cazuela, ponemos las tres cucharadas de aceite de oliva y pochamos la cebolla troceada. Incorporamos las tres cucharadas de harina y damos unas vueltas para que se sofría. Vamos añadiendo la leche poco a poco y sin parar de remover. Ponemos sal a nuestro gusto y nuez moscada.
   Si nos quedan grumos, o para que no se noten los trocitos de cebolla, podemos pasar la bechamel por el brazo triturador (minipimer).
   Embadurnamos el recipiente que vayamos a utilizar de mantequilla y forramos el fondo con placas de lasaña. Distribuímos una capa de relleno y cubrimos con más placas de lasaña. Así haremos las capas que queramos que tenga nuestra lasaña. En mi caso, hice tres.
   Vertemos sobre la lasaña la bechamel, cubriendo bien y dejando que se cuele por toda la lasaña. Cubrimos con una buena capa de queso rallado.

   Horneamos, precalentado el horno a 200º, unos 20 minutos.
   Dejamos templar y servimos.

15 de marzo de 2012

Chapata Chupadedos para #eldiadelsuperbocata

  ¡Que sí, que ya me he vuelto a liar!
 Cuando hace unos días me comentaron por Twitter, que se estaba gestando #eldiadelsuperbocata, y que si me apuntaba a ello, ¿qué iba a hacer yo?. Pues preparar uno de esos bocadillos que me dejan sin “sentío”.
   No sé muy bien de dónde surgió la idea pero sí que, dando caña a este tema, han estado @Roseta_bcn (a ver cuándo te abres el blog, niña!), @Maryadrisc, alias "la Niña Pimiento" y @PatrixDQV (Dime que es Viernes).  Luego, surgió una propuesta solidaria: @J_Morera va a hacer un superbocata para Cáritas y, por cada retweet de su mensaje, va a darle un centímetro más a ese bocadillo. Conforme está el tema de los comedores sociales en estos días, me parecía genial poder participar. 
 Aprovechando que tenía unas chapatas caseras en casa, me he preparado un “superhipermegabocadillo” que me ha servido de comida-merienda-cena. Creía que no me lo iba a poder acabar… pero yo soy más fuerte! (la receta de las chapatas espero poder subirla pronto al blog).


   Eso sí, como siempre, lo he dejado para el último momento. Los que me conocéis, sabéis que soy así, que me gusta trabajar bajo presión, jajaja.
Vamos a necesitar:
  • Unos ramilletes de coliflor
  • Una loncha de panceta o bacon
  • Un huevo XL, con semejante bocadillo no iba a poner un huevito de codorniz
  • Sal
  • Un buen pan
  • Aceite de oliva virgen extra (un buen huevo frito pide a gritos un buen aceite)
  • Mucha hambre

   Fileteamos la coliflor y la ponemos en una sartén con un buen chorro de aceite de oliva y un pellizco de sal. La dejamos que, a fuego lento, se vaya haciendo blanda y cogiendo ese color que veis en la foto, bien rehogada.
   Ahora, con una gota de aceite, ponemos la loncha de panceta a dorarse (a mí me encanta bieeeeen dorada).
  En otra sartén, freímos el huevo. Mi recomendación es no hacerlo demasiado. Así, cuando demos un mordisco al bocata, nos va a chorrear la yema, junto al aceitillo y los trocitos de coliflor que, inevitablemente, se nos van a caer, dando sentido a lo del bocata “chupadedos”. Si no, ya me lo contaréis.
  Montamos la mezcla dentro del pan. Coliflor, huevo y panceta…
  (Me abstengo de poneros una foto de la cara que se me quedó cuando conseguí acabarme el superbocata, que casi no podía ni moverme)
  Si me da tiempo, os haré un copia-pega de la lista de participantes, si es que alguien la confecciona...

  ¡A disfrutar #eldiadelsuperbocata!

11 de marzo de 2012

Huevos Rebozados


   Sí, sí, rebozados... y bien rebozados. ¡Menudo alimento que tiene esto!
  Esta receta la ví en el blog Recetas Irlandesas, me apetecía probarlos (sólo probarlos, eh?) y, la verdad, es que ha resultado un plato de bastante éxito.
  Con algo ligerito, estos huevos rebozados, tienen una buena comida o cena. Sólos, están buenísimos y mis catadores los han comido también con salsa agridulce, con muy buen resultado.

Para estos 4 huevos rebozados, utilicé:
  • 4 huevos hervidos
  • 350 g de carne picada
  • sal
  • perejil picado
  • media cebolla pequeña picada muy fina
  • una pizca de nuez moscada
  • una pizca de pimienta
  • un huevo grande, separada la clara de la yema
  • pan rallado
  • aceite para freirlos 
   Pelamos los huevos duros y los reservamos.
  Mezclamos la yema de huevo con la carne picada, la cebolla, el perejil, la sal, la nuez moscada, la pimienta y un par de cucharadas soperas de pan rallado.
  Nos humedecemos las manos y envolvemos cada huevo en una capa generosa de la mezcla de carne.
   Batimos un poco la clara de huevo, la ponemos en un cuenco o en un plato hondo. En otro, ponemos pan rallado. 
   Ponemos una sartén al fuego con abundante aceite, hasta que esté bien caliente.
  Cada huevo "envuelto" lo rebozamos, primero, en la clara batida y, luego, en el pan rallado. Freímos hasta que se doren bien por todos lados. Cuando los tenemos dorados, los sacamos del aceite y los dejamos sobre un papel absorbente.

   Servimos y ...
   ¡A comer!

6 de marzo de 2012

Cortezas de Mar

   Conocéis los torreznos o cortezas, ¿verdad?. Pues esto es algo parecido... o no.
   Pero, bueno, si se trata de reciclar, ésta es una receta de reciclaje total.
   Tengo un amiguete que es del sur y un día me comentó que, en su casa, tenían costumbre de comer esta tapita que os traigo hoy. Me sorprendió bastante, pero decidí probarlo. 
   Lo he hecho en un par de ocasiones. La primera, con muy poquita cantidad para los de casa y, la segunda, un día que éramos más para comer. Lo cierto es que, como nos gustó a todos, decidí que os la iba a traer.
   Bueno, se trata de un aperitivo de ricas cortezas... de rape. Sí, unas cortezas hechas con la piel de rape y que están, sorprendentemente, buenísimas.

   Lo que yo hago es, cuando compro un rape de buen tamaño, pido que no tiren la piel. Me la llevo a casita y la congelo. Estas cortezas las preparo cuando tengo dos o tres, porque menguan un montón.
   Vamos a necesitar:
  • Piel de rape
  • Sal
  • Aceite de Oliva Virgen Extra
  • Harina para fritos (mi amigo dice que, como queda increíble, es con harina de garbanzos)

   La piel de rape, bien limpia, la tenemos que escaldar en agua hirviendo. Esto hace que se encoja una barbaridad: de tener una buena piel de rape os quedaréis con algo así como una pelota deforme, arrugada y poco apetecible, pero no os preocupéis, tiene que ser así.
   Sacamos la piel del agua y la dejamos escurrir bien.
   Troceamos, salamos y enharinamos. Sacudimos un poco la piel de rape, para quitar el sobrante de harina.
   La sartén la tendremos con abundante aceite y bien caliente. Freímos los trozos de piel de rape y los dejamos sobre un papel absorbente para quitar el sobrante de aceite.

   Servimos tan pronto como nos sea posible, como realmente están buenas son recién hechitas.
¡A disfrutar!
   

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