Tartaletas de Crema de Naranja

   Recuerdo (como si fuera el otro día :) ) cuando era una adolescente pegada al radiocasette, en esa época era lo que había, como ahora anda mi hijo pegado a su móvil en plan "no puedo vivir sin la música". La verdad es que sigue gustándome la música de igual forma, hasta la que escucha mi hijo.

   Igual escucho música relajante en plan zen que música que me pone melancólica, que me pongo música en plan marchoso para activar mi #modomopa (mira que es aburrido esto de limpiar en casa!), que me pongo para cocinar... para eso lo tengo tenía más complicado. Vivo en un barrio bastante tranquilo y si quisiera escuchar música desde el equipo,tendría que ponerlo a un volumen que a mis vecinos no les iba a gustar un pelo. 

   De hecho, la música me acompaña en muchos momentos pero lo echaba de menos en la cocina, donde paso una gran cantidad de tiempo. Yo no tengo ni ipad, ni ipod ni nada que se le parezca. Mi móvil es muy modesto y una de las pocas cosas que tengo en su tarjeta son las canciones que me ha ido grabando mi hijo (que ya se entera de todo esto mucho más que yo). Por eso, pensé que igual no iba a funcionar un invento que os voy a presentar junto con la receta de hoy...

   Hace unos días se pusieron en contacto conmigo desde Mobilefun y me ofrecieron probar uno de sus accesorios, éste altavoz bluetooth que llegó a casa en apenas 24 horas... ¡Ya tengo música en mi cocina! El invento va genial, igual funciona de altavoz para alegrarme esas tardes cocineriles que hace de manos libres, con muy buen resultado. Suena genial para ser tan pequeño, y el volumen lo regulo desde el móvil. El problema ahora lo tengo con mi hijo que, en cuanto me descuido, se lo agencia para hacer los deberes animadamente, como es tan discreto se puede poner en cualquier rinconcito... 

   Os pongo una foto para que veáis el tamaño que tiene, junto a una pequeña naranja o una taza de café.

Y, ahora, vamos con la receta...

   Normalmente, tengo mantequilla en casa y no tengo masa quebrada, así que la preparo yo. Esta vez, fue al contrario: no tenía mantequilla, pero sí un rollo de masa quebrada. Con ella he preparado la receta.

   Hacemos unas tartaletas redondas o cuadradas, con la masa quebrada y horneamos a 180º , hasta que se doren. 

   Las rellenamos con la crema de naranja, que lleva estos ingredientes:

• 150 ml de agua
• 25 g de mantequilla
• 80 g de azúcar
• 50 g de maizena
• 75 ml de zumo de naranja
• Ralladura de la piel de la naranja
• 2 huevos
• 2 cs de azúcar

   Ponemos en un cazo el agua y la mantequilla al fuego, hasta que comience a hervi. Apartamos y dejamos enfriar.

   Añadimos el azúcar y la maizena. Lo ponemos otra vez al fuego todo junto y cocemos, sin dejar de remover con un batidor de mano, hasta que espese.

   Cuando haya espesado, agregamos el zumo de naranja y la ralladura, removemos y dejamos enfriar.

   Añadimos las dos yemas de huevo y volvemos a remover bien.

   Con las dos claras de huevo y dos cucharadas soperas de azúcar, hacemos un merengue. Lo ponemos por encima de la crema de naranja. Gratinamos en el horno o quemamos un poco las puntas con un soplete, que es lo que yo he hecho.

   Tengo una asignatura pendiente con el merengue... pero conseguiré dominarlo y que me salgan unos merengues bárbaros. ¡¡¡Me cueste las claras que me cueste!!!

Esta semana, otra receta dulce. Diferente, pero dulce y también con sabor a naranja.