Aunque mi intención es publicar una o dos veces a la semana... no llego. Lo intento, pero no llego. Espero que, cuando colegios y demás estén ya a marcha normal, material comprado, extraescolares y todas esas cosas, me pueda organizar mejor. Ahora voy muy sobre la marcha, a golpe de necesidad... que no a golpe de plancha, que a ésa le van a salir telarañas del tamaño de una sábana. Es que siempre hay cosas por hacer, cachis... seguro que sabéis perfectamente de lo que os hablo, ufff.
Me gustan los tomates cherry, mucho. Casi siempre encuentro más sabor en los cherries que en los tomates normales #noalostomatesdeplástico. A mi hija también le gustan mucho. Y tengo un sobrinete que se pirra por ellos... cuando mi hermana compra los tomatitos, tiene que ir con cuidado con él porque, a la que se da cuenta, ha abierto el paquete y se ha pasado medio. Así, sin lavar ni nada, que tienen más sustancia...
Además, visualmente, me parecen de lo más bonito. Y tenía ganas de hacer una crostata con ellos. La masa queda crujiente y ligera. En casa gustó mucho y no tardaré en repetir... tengo unos cherry ecológicos en la nevera que lo están pidiendo a gritos.
Os dejo con la receta, por si os apetece hacerla...
Ingredientes de la masa:
- 1 vaso de agua tibia, unos 200 ml
- 5 g de levadura fresca
- un chorrito de vinagre de manzana
- 100 ml de aceite
- 400 g de harina
- una pizca de sal
- albahaca u orégano
Ingredientes del relleno:
- Tomates cherry (aunque también podéis poner tomate normal a rodajas)
- Calabacín blanco (o verde) en rodajas finas
- Queso de rulo de cabra, a lonchas
- Albahaca
- Aceite de oliva virgen extra
Extender la masa y cubrir el fondo con las rodajas de calabacín. Encima de éstas, las cortaditas de queso de rulo de cabra y, por encima, cubrir con los tomates cherry, cortados por la mitad. Dejaremos un espacio de unos 3-4 dedos de masa sin cubrir, desde el borde, para luego voltear esa masa sobre el relleno y así hacerle el borde.
Espolvorear con sal, albahaca (u otra hierba aromática) y un chorrito fino de aceite de oliva virgen extra.
Precalentamos el horno a 200º y, cuando vamos a meter la crostata, bajamos a 180º. Horneamos hasta que la masa se haya dorado (en mi caso fueron unos 20 minutos).
Dejamos enfriar un poco antes de servir. El interior, con el queso de cabra, guarda bastante calor. Así que, tened cuidado con la lengua :-p
¡Espero que os guste!
Hola guapi, no te preocupes, todos vamos igual de culo!!! No pasa absolutamente nada, aqui seguimos esperando nuevas recetas y si nos traes cositas como estas...... con ansias estamos aqui!!! Que rica!!! Me encanta el aspecto, me apunto la receta, porque nos encanta cenar cada Viernes de esta forma, comida estilo pizza y acompañada de una cerveza! Que delicia! Un besote
ResponderEliminarParecida a la que he publicado yo hoy!! es que estas recetas con tomates cherry y ahora apetecen muchisimo, merece la pena sacar un poco de tiempo, jeje
ResponderEliminarMe gusta mucho, Maite! Tiene muy buena pinta, besotes!!
ResponderEliminarTranquila que a todas nos pasa lo mismo.
ResponderEliminarYo no tengo hijos, y me pasa pues imaginate cuando los tenga.
Me ha gustado mucho, encima se ve crujiente y con los tomatitos cherry ya ni te cuento.
Pura perdición
Un besito
No te apures por lo de pubicar poco, yo creo que la mayoria estamos igual.
ResponderEliminarEs que no se puede llegar a todo.
Me encanta esta costrata. Como tengo muchos cherrys y calabacines en el huerto, voy a hacerla.
micocinayotrascosas.com
Yo me armo un taco con las costratas, las galettes y demás inventos que nunca sé quien es quien, la verdad...
ResponderEliminarLa tuya, maravillosa y ya me vale no haber preparado nunca ninguna ... en fin, que es pereza pura y dura :-D
Besotes
Que bonita te ha quedado Maite!! No me importaría tomar ahora un trocito!!
ResponderEliminarUn besito,
Sandra von Cake