Caracolas de hojaldre con salmón

     Tras unos 15 días bastante ajetreados, en los que no he tenido tiempo más que de pasar el día a día, he vuelto.
     Esta tarde me he puesto a preparar unas cuantas recetillas, nada complicado, y ésta  ha sido una de ellas. La verdad, me hubiera gustado tener tiempo para más, pero ¡hay que ver cómo se van las horas!
     Bueno, ya sabéis que, para preparaciones socorridas y fáciles, me gusta mucho el hojaldre, la masa quebrada...y esto se prepara en un pis pas.
    

     Simplemente hay que extender un rollo de hojaldre fresco (a mí es el que más me gusta pero, también, se puede hacer con el congelado). Troceamos un pimiento del piquillo y lo vamos colocando sobre la placa de hojaldre.

     Los ingredientes que pongamos para rellenarlo no deben llegar al borde, sino quedarse a un par de dedos de él.

     Troceamos queso de cabra (del de rulo) y lo ponemos sobre los trozos de pimiento o en los huecos que vayan quedando.

     Por último, troceamos dos o tres lonchas de salmón ahumado (en mi caso, era marinado en casa) y lo repartimos también sobre el hojaldre.

     Una vez hayamos repartido toda la mezcla, lo volveremos a enrrollar. Cuando estamos llegando al final del rollo, "pintamos" con huevo batido el borde (para que selle bien), y terminamos de cerrarlo. 

     Con un cuchillo vamos cortando nuestras caracolas, de medio dedo de grosor más o menos. Las distribuimos sobre un papel de hornear que habremos puesto sobre la placa de horno y las "pintamos" también de huevo batido.

     Precalentamos el horno a 200º y las tenemos 12-15 minutos, hasta que suba el hojaldre y se doren.

     Y listas. Fácil, no?. Lo bueno, es que quedan bastante vistosas y las podéis rellenar con los ingredientes que más os gusten...