¿Qué hay más rico para el desayuno y la merienda que unos ricos bollitos calentitos?
La receta de hoy está sacada, de nuevo, de El Libro de Cocina.
Lo cierto es que calentitos están espectaculares, pero fríos no me gustan tanto. Así que, los hice y, nada más enfriarse, congelé unos cuantos. Para volverlos a consumir, basta con sacarlos del congelador un ratito antes y ponerlos en la tostadora (si la ranura es lo suficientemente ancha) o en el horno. Yo tengo un hornito pequeño que, para esas cosas, me va genial.
Ingredientes:
- 225 gramos de harina bizcochona (que ya lleva levadura incorporada)
- Media cucharadita de sal
- 60-70 gramos de pepitas de chocolate (la receta original es con 50 gramos de pasas sultanas)
- 60 gramos de mantequilla en dados
- 30 gramos de azúcar
- 150 ml. de leche (en mi caso, sin lactosa)
- 1 huevo batido
Primero, vamos a precalentar el horno a 210º-220º.
Tamizamos la harina con la sal en un cuenco, añadimos las pepitas de chocolate y mezclamos. Incorporamos la mantequilla, deshaciéndola con los dedos, frotándola con la harina. Agregamos el azúcar.
Abrimos en el centro de la mezcla un agujero, en el que vamos a verter la leche y a remover. Iremos empujando la harina hacia el centro y amasando.
Cuando la masa está blanda (y pegajosa) la pasamos a una superficie enharinada y amasamos. La extendemos hasta dejarla de un grosor de unos dos dedos.
Con un cortapastas enharinado, iremos haciendo nuestros bollitos. También lo podéis hacer con un cuchillo si no tenéis cortapastas. Con un vaso no lo hagáis, porque esta masa es bastante pegajosa y se os quedará dentro del vaso.
Ponemos papel de horno en la placa de hornear. Ponemos los bollitos separados y pintados de huevo batido.
La placa la deberemos poner en la parte alta del horno y tendremos los bollitos entre 10 y 15 minutos, dependiendo del horno y vigilándolos, hasta que se hayan dorado.
Los sacamos y los dejamos entibiar sobre una rejilla.
¡¡¡ Ya me diréis si no están ricos !!!
Unos bollitos de estos tienen que venir de lujo para una merienda.
ResponderEliminarSaludos
Tienen una pinta deliciosa, tengo que probar a hacerlos.
ResponderEliminarPues, ricos, ricos, ricos se ven Maite, me gustan mucho, hay tantas cosas que quiero hacer y no llego..... supongo que a ti te pasa lo mismo. UN BESO!!!!
ResponderEliminarSería incapaz de resistirme a uno de estos bollitos, recien hechos, ummmm!!! qué ricos.
ResponderEliminarBesitos.
Jose Manuel, para la merienda, para el desayuno...y a cualquier hora, jeje
ResponderEliminarPraxedes, prueba, que se hacen en un momentín.
Isa, por supuesto, quisiera hacer tantas cosillas y tengo tan poco tiempo...ahora, con las vacaciones, estoy investigando con los helados y mis hijos, por supuesto, encantados.
Un beso a tod@s
Buenísimos!! Tienen una pinta excelente. Yo no se si me llegaría para congelar alguno, me los comería de una atacada, je!je! Besos
ResponderEliminarTengo que apuntarme esta receta, se ven muy ricos! y parecen sencillos de hacer! besines guapa
ResponderEliminarQUE RICOSSS, ME CHIFLAN Y A UNA QUE YO ME SÉ, EN MI CASA MÁS,JEJEJ GRACIAS POR PASARTE POR MI BLOG , YO ME QUEDO POR EL TUYO TAMBIÉN, BESITOS
ResponderEliminarme quedo de seguidor pero ya!!!!! un beso
ResponderEliminarUn lujazo teneros a todos por esta cocina.
ResponderEliminarMiles de besos a todos
Mmmm, Aquí no hay manera de hacer régimen, ains. Saludos.
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