Ensalada de Zanahoria

   Vuelvo. Así, de forma rápida y con esta ensalada, tan sana como rica... si te gustan las zanahorias, claro. Últimamente, he decidido quitarme bastante proteína animal y busco recetas de vegetales que no sean las típicas verduritas hervidas o asadas. 

   Esto, unido a que me gusta navegar por páginas que combinan otros sabores y formas de cocinar, me llevó, hace un tiempo, hasta Bienvenida a mi Cocina. Ví esta ensalada y, al instante, supe que me iba a gustar y se iba a convertir en una habitual en mi mesa.

   Os dejo con la receta que es, además, de las que más me gustan... sin cantidades, a ojo y al gusto!

Ingredientes:

• Zanahorias
• Dientes de ajo
• Zumo de limón
• Sal
• Pimienta
• Cominos
• Aceite de oliva virgen extra

   Pelamos y troceamos en dados las zanahorias.

   En un cazo, ponemos abundante agua, con un poco de sal. Más que cocerlas, yo las he escaldado; me gusta que se queden "enteras". Así que, en un par de minutos hirviendo, listas.

   Escurrimos las zanahorias.

   Mientras, pelamos los dientes de ajo y los partimos en trozos muy pequeñitos.

   En una sartén, calentamos un par de cucharadas (o un chorro) de aceite de oliva. Ponemos en ella las zanahorias, los ajos, un poco de pimienta, algo de sal, el zumo de limón (medio limón puse yo) y cominos. Como a mí me gusta mucho el sabor del comino, puse un poco molido y, también, en grano.

   Dejamos, a poco fuego, unos minutos, removiendo de vez en cuando, para que se mezclen todos los sabores.

   Servimos.

   La ensalada me ha gustado tanto caliente, como tibia o fría. Con estas ventajas, creo que en los próximos días de calor que se avecinan, voy a comer unas cuantas veces esta ensalada... moreno veraniego garantizado :)

¡Espero que os guste!