Esta receta la tengo desde hace bastante tiempo pendiente de publicar. Desde que la hice por primera vez, siguiendo las instrucciones de Lola en la Cocina, la he hecho varias veces. Y, siempre, con el mismo buen resultado. En casa, sobre todo, a mí y a mi peque, nos gustan mucho los encurtidos… nos peleamos por los pepinillos en vinagre! Así que creí, sin equivocarme, que estos calabacines, se quedarían como un clásico por casa.
Curiosamente, salvo ciertas personas que “odian” las olivas y encurtidos, a quienes se los he dado a probar, les han gustado. Se han sorprendido de que fueran calabacines, porque pensaban que eran pepinos.
Eso sí, os diré que para hacerlos así, me gusta que no sean calabacines gordotes; así no se han hecho grandes las pepitas y están más tiernos. Si tenéis una mandolina o un procesador con ese tipo de cuchilla, os facilitará y ahorrará un montón de trabajo (además de que, para hacerlo con cuchillo, hay que tener un pulso firme del que yo carezco).
Ingredientes:
- 400-500 gr. de calabacines
- Media cebolla o un par de chalotas picadas
- 2 cp de sal
- 1 cp de mostaza en grano
- 500 ml de vinagre de manzana o de vino blanco
- 100 g de azúcar
- Media/una guindilla seca troceada (dependiendo de si nos gusta más picante, pondremos más guindilla y dejaremos o no las semillas)
- 1 cp de cúrcuma
- Podemos añadir ajo, pimienta en grano... al gusto
*También necesitaremos uno o dos botes de cristal esterilizados.
Elaboración:
Cortamos en rodajas bien fina, con la mandolina mejor, los calabacines. Picamos la cebolla y lo ponemos todo en un cuenco hondo, junto con la sal. Removemos y cubrimos de agua fría. Dejamos macerar de 30 a 60 minutos.
Pasado este tiempo, cogemos la mezcla y la estrujamos bien con las manos, escurriendo bien el agua.
Ponemos los calabacines en el bote.
Mientras tanto, ponemos el vinagre con el azúcar y hervimos hasta que ésta se disuelva. Apartamos del fuego y añadimos la mostaza, la guindilla y la cúrcuma. Removemos bien y dejamos enfriar.
Cuando el líquido de encurtir haya entibiado, lo vertemos sobre los calabacines en el bote. Tapamos bien y dejamos enfriar los botes del revés.
Una vez estén fríos los botes, los ponemos en la nevera y esperaremos (esta parte es la más difícil) dos o tres días para consumirlos. Así, habrán tomado el sabor del líquido de encurtir. Cuantos más días dejemos los calabacines, más y mejor sabor tendrán.
¡Espero que os guste!
Ostras he probado verduras encurtidas, pero nunca calabacín....me imagino que tiene que estar dvicio.....me la apunto como pendiente. Un abrazo.
ResponderEliminarNos encantan los encurtidos, y los calabacines los tenemos pendientes, tienen que estar de diez!!
ResponderEliminarun abrazo y feliz semana!!
Qué lástima no haber conocido esta receta cuando aún tenía mi huerto y no sabía qué hacer con tanto calabacín!!!! Ya mismo estoy en el mercado comprando unos cuantos para probar la receta!!!
ResponderEliminarUn besote!!!
Vaya, vaya... que ricos tienen que estar así!!! Y lo bien que se conservan...
ResponderEliminarUn besito,
Sandra von Cake
Vaya receta buena!
ResponderEliminarLa haré..prometido!
Calabacines encurtidos ??? ups que curioso !!!
ResponderEliminarNunca los había visto y mucho menos probado.
Besotes
No conocía los calabacines encurtidos, pero seguro que deben estar muy buenos! Un beso!
ResponderEliminaroohhh me encanta los calabacines y encurtidos no los conocía, gracias por la receta. un besote.
ResponderEliminarcomoguaparachocolate-myriam