#Megamagdalena

     Suena bien, no? Sobre todo, suena grande. Y lo es.

     Y también es divertido. El precursor de esta aventura es Futurobloguero, desde su Lazyblog . ¡¡ Y, a nosotros, sólo nos falta que nos toquen las palmas !!

     Porque la cocina también es divertida y, de hecho, la acogida de la #megamagdalena ha sido tremenda. Un montón de variedades de ellas se publican el 3 de mayo en los distintos blogs que nos hemos unido a esta iniciativa. Y muchos de ellos, van a recoger todas las participaciones (de los megamagdaleneros que tengan y de los que no tengan blog).
    

     El miedo que tenía con ella, era que no se hiciera bien por dentro. Pero, quedó, no sólo bien horneada por dentro, sino también jugosa y suave.

     Dentro de que sea una magdalena, he procurado que tuviera ingredientes más ligeritos. Eso sí, he echado de menos el chocolate (me confieso).

     Mi #megamagdalena es apta para intolerantes a la lactosa. Aunque también se puede hacer con leche normal, claro.

   

Ingredientes para una #megamagdalena hermosa o 12 de sus hermanas pequeñas:

• Un huevo XL
• Una pera conferencia, a trozos muy pequeñitos
• Zumo de medio limón
• 200 grs. de harina de reposteria y 85 grs. de harina de centeno
• Un sobre de levadura
• Un pellizco de sal
• Una cucharadita (de café) de esencia de vainilla
• Una cucharadita (también de café) de bicarbonato
• 6 cucharadas soperas de aceite
• Dos cucharaditas (de postre) de semillas de amapola
• Dos vainas de cardamomo molidas (las semillitas)
• Una chispa de clavo y de canela molidos
• 125 grs. de azúcar moreno
• 250 ml. de leche sin lactosa.

¿Cómo hacer una #megamagdalena con todo esto?

     Ponemos a remojo la pera con el zumo de limón y la mitad del azúcar.

     Tamizamos, en un bol grande, las harinas (con un colador cuyos agujeros no sean pequeños) con las especias, la sal, la levadura y el bicarbonato.

     Le añadimos el resto del azúcar y mezclamos todo.

     Aparte, batimos el huevo con la leche, el aceite, la vainilla y la mezcla de pera.

     Lo incorporamos al bol de las harinas y removemos, hasta que esté todo bien mezclado.

     Forramos con papel de horno un molde. En mi caso fue una flanera de Pyrex. Vertemos la mezcla en ella y la ponemos en la nevera, al menos, una hora.

     Precalentamos el horno a 200º.

     Metemos en el horno la flanera con la masa megamagdalenil. Yo fui comprobando con una brocheta cómo se iba cuajando por dentro. Al final fue un total de una hora y 5 minutos: estuvo 15 minutos a 200º, 20 a 160º y unos 30 minutos más a 130º.

         

    
     Ufff, cómo cuesta sacar adelante una #megamagdalena, sin experiencia previa en mega-nadas. Pero el esfuerzo valió la pena.

     Aquí os dejo otras perspectivas de mi #megamagdalena:

              Esta #megamagdalena tan hermosota que os presento, ha pesado 760 gramitos de nada...desayunos para unos cuantos días en casa.